Escrito por: Dra. Amalfis Núñez ( sexualidadal dia@gmail.com)
Violencia: es el tipo de interacción humana que se manifiesta en conductas o situaciones de forma deliberada, que provocan daño físico, sexual o psicológico a un individuo o a una comunidad.
Esta puede manifestarse también como una amenaza sostenible y duradera, causante de daño psicológico en quienes la padecen y con repercusiones importantes en toda la sociedad.
Existen muchas formas de ejercer la violencia: en el trabajo, las escuelas y colegios, pareja, familias, en la comunidad.
Existen muchos tipos de violencia: verbal, psicológica, social, sexual, conyugal, familiar, política, económica, cultural, cotidiana. Ejemplos simples y cotidianos serían, en las escuelas y colegios, negar permisos para ir a realizar una necesidad fisiológica; las omisiones, como son, padres que niegan a los hijos atenciones y cuidados, no suplen sus necesidades o los obligan a estudiar carreras que ellos no quieren.
Importantizamos en este escrito la Violencia Doméstica, que se refiere a la violencia psicológica y física ejercida hacia la pareja y los hijos. Esta traduce una disfunción importante del sistema familiar y social. La violencia expresa abuso de poder y supone control y fuerza en quien la ejerce; en las personas abusadas y cercanas, supone sufrimiento y trastornos físicos y psicológicos, haciendo a estas personas vulnerables a las enfermedades.
Rechazar, ignorar, asustar, aislar a una persona, no prodigar las atenciones que un niño o un anciano necesitan, es violencia.
Empecemos por controlar nuestros impulsos negativos, si no podemos solos, buscar ayuda de un profesional, revisar nuestras creencias, valores, actitudes y amar.
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