Son muchas las enfermedades y muertes producidas por transmisión hídrica. La Organización Mundial de la Salud reporta que mil cien millones de personas en el globo terráqueo no tienen acceso a una fuente mejorada de agua potable. Esta es una situación muy difícil para salud pública y hay que trabajar pronto con medidas certeras para resolver el problema y más si tomamos en cuenta que, según el organismo rector del sector sanitario en el planeta, un número de personas, más alto que éste, consume agua contaminada. Las enfermedades de transmisión hídrica se llaman así porque nos llegan a través del agua que consumimos. Es decir, este líquido es el vehículo imprescindible para sufrir de estas patologías.
Como consecuencia de esta dolorosa realidad se
producen 4 mil millones de casos por diarrea cada año en el mundo y más del 85
por ciento se atribuye a insalubridad del agua y a deficiencias de saneamiento
e higiene, según cifras dadas a conocer por la Organización Mundial de la Salud
(OMS).En esta información se establece que un millón ochocientos mil personas
mueren cada año por enfermedad diarreica, el mayor porcentaje de estos
fallecimientos corresponde a niños que no han cumplido cinco años.
Lo más lamentable es que, según a la Organización
Mundial de la Salud (OMS), el 94 por ciento de los casos producidos por diarrea
podría evitarse mediante modificaciones del medio o intervenciones que permitan
incrementar la disponibilidad de agua limpia y mejorar el saneamiento y la
hiegiene de este líquido vital.
Hay una serie de medidas que nos pueden ayudar
mucho en la prevención de las enfermedades de transmisión hídrica, que van a
variar bastante y tenemos que adaptarlas a las condiciones socioeconómicas de
las comunidades. Entre ellas están hervir el agua, almacenarla de manera
correcta para evitar su contaminación, investigar con las autoridades
sanitarias cuál es el método más barato y efectivo que la gente puede usar en
su casa sin sacrificar la calidad.
Si tenemos agua potable y evitamos su contaminación
logramos una mejor salud y al mismo tiempo evitamos una gran cantidad de
muertes. Además de hervir el agua también debemos filtrarla.
Un elevado porcentaje de enfermedades como fiebre
tifoidea, cólera, hepatitis A, diarrea, giardiasis, amebiasis, filariasis,
esquistosomiasis y balantidiasis es transmitido por el agua contaminada.
0 Comentarios