Ticker

6/recent/ticker-posts

¿Por qué la adolescencia es una etapa difícil?

 


Por Andrés Carrillo

Durante la etapa de adolescencia, los jóvenes deben experimentar una serie de cambios físicos y psicológicos que producen incertidumbre. Te contamos cómo se puede ayudar a los hijos durante la transición.

La adolescencia es una etapa compleja por todos los cambios físicos y psicológicos que ocurren. Es importante que los padres lleven a cabo un estilo de crianza apropiado; entre más equilibradas las enseñanzas, mejores formas de afrontamiento tendrán los jóvenes.

El equilibrio debe estar entre la autoridad y el afecto. Por eso analizamos esta fase del crecimiento con detenimiento en este artículo.

5 razones por las que la adolescencia es una etapa difícil

Durante la etapa adolescente ocurren cambios físicos y psicológicos. Son precisamente estos cambios los que promueven las complicaciones personales. Los adolescentes no tienen definida su personalidad y se encuentran en un proceso de búsqueda.

A continuación revisaremos un listado con algunas razones que hacen de la adolescencia una etapa complicada. Los siguientes aspectos forman parte del proceso de desarrollo humano.

1. Aceptar que la infancia quedó atrás

A partir de los 12 años, los intereses de los jóvenes cambian. Esta circunstancia es normal, puesto que han dejado de ser unos niños.

Sin embargo, para algunos esto puede representar un proceso de duelo. Es decir, aceptar que la infancia ha quedado en el pasado no siempre es agradable.

Las resistencias a abandonar la niñez son naturales en los primeros años de la adolescencia y eso contribuye a que sea una etapa difícil. En este caso, los padres deben apoyar en el proceso. Lo ideal es dar explicaciones que aclaren las dudas que puedan tener los nuevos adolescentes.

2. Inconformidad con los cambios físicos

Los altos estándares de belleza que postula la sociedad pueden ser un problema en la adolescencia. Muchos jóvenes intentan sin éxito conseguir una apariencia que satisfaga las expectativas sociales. Es decir, buscan ser aceptados por medio de su físico.

Por consiguiente, los padres o cuidadores deben potenciar la autoestima de los adolescentes. Se ha comprobado que una autoestima bien establecida es un factor protector contra el bullying y la depresión. Cuando los jóvenes tienen un buen autoconcepto son más capaces de lidiar con la presión social.

3. Búsqueda de espacio personal

La búsqueda de intimidad o espacio personal comienza con la llegada de la etapa adolescente. Esto es que los jóvenes no desean que sus padres lo sepan todo respecto a sus vidas; comienza un desprendimiento de las primeras figuras de afecto. Los adolescentes buscarán iniciar relaciones profundas con sus semejantes.

Dentro de este orden de ideas se encuentran las primeras relaciones de noviazgo. Es natural que en la adolescencia las personas experimenten por primera vez el amor romántico. Por una parte, esto resulta emocionante, pero por la otra atemoriza.

4. Se pierde la idealización hacia los padres

Durante los primeros años de vida el rol de los padres representa protección. Pero eventualmente, la idea de seguridad incondicional respecto a los padres cambia.

Llegado este punto, es bueno que los padres sean capaces de darle espacio a los hijos. Sin embargo, siempre se debe prestar atención a la manera de comportarse de los adolescentes; es necesario mantenerse cercano a ellos sin ser invasivos.

5. Incertidumbre respecto al futuro

Las fantasías sobre el futuro son una constante durante la edad adolescente. Las personas jóvenes tienen la tendencia a visualizarse en situaciones agradables para ellos. Sin embargo, en muchos casos estas fantasías representan una expectativa irrealizable.

A medida que el tiempo avanza, los jóvenes comienzan a replantearse sus metas. Al mismo tiempo que buscan un futuro prometedor, se enfrentan con las complicaciones de la realidad. Los obstáculos que separan a los adolescentes de sus metas son variados.

Consejos para convivir y apoyar a un hijo adolescente

La crianza de un hijo adolescente no tiene por qué convertirse en un martirio. Por lo contrario, relacionarse con los adolescentes puede ser una experiencia enriquecedora. Te ofrecemos algunas recomendaciones para mejorar la relación con ellos.

Potencia las cualidades de tu hijo adolescente

Los principales conflictos surgen porque algunos padres pretenden que sus hijos sean un reflejo de ellos. Lo recomendable es ayudar a los jóvenes a identificar sus cualidades y potenciarlas, procurando que se sientan libres de hacer lo que les apasiona, sin limitaciones o juicios de valor.

Procura buscar soluciones conjuntas

Es importante aceptar que los hijos también pueden aportar soluciones reales. Algunas veces, los padres tienen la idea de que los adolescentes no están preparados para resolver conflictos por ellos mismos, lo que no es verdad.

Los jóvenes pueden afrontar algunas situaciones cotidianas. Por ejemplo, reprobar un examen por una mala distribución del tiempo para el estudio es algo que un adolescente puede solventar. Los padres orientarán en la resolución del conflicto, siempre y cuando no sea de forma arbitraria.

Aprende a negociar con los adolescentes

El estilo de crianza apropiado para mejorar la relación con los adolescentes está basado en la negociación. En este sentido, es indispensable que los padres estén dispuestos a ceder en algunos aspectos.

Permite que aprendan a su ritmo

Cada joven tiene un ritmo diferente de aprendizaje. Resultaría injusto esperar que los adolescentes aprendieran igual que lo hemos hecho nosotros. Por esta razón, habrá que ser pacientes, evitando presionar demasiado a los hijos para que cumplan nuestras expectativas.

Incorpora estilos de comunicación asertivos

La adolescencia es una etapa difícil de mucha sensibilidad emocional. Es natural que los jóvenes se tomen a título personal las frases o expresiones que dicen sus padres con respecto a ellos. Para evitar situaciones tensas y momentos incómodos es recomendable comunicarse de forma empática.

La base de la comunicación asertiva es ponerse en el lugar del otro. En este orden de ideas, debemos ser cuidadosos con la elección de las palabras y el tono de voz que empleamos.

¿Siempre es difícil lidiar con los adolescentes?

Algunos adolescentes pueden ser más complicados que otros. Dependerá en gran medida de los estilos de crianza durante la infancia y las características personales de cada joven.

Por estas razones, no se podría afirmar que la adolescencia es siempre una etapa difícil. Sin embargo, es recomendable prepararse para los cambios naturales de esta fase.

 

Publicar un comentario

0 Comentarios