Norys Velez
El cabello graso es una situación común entre muchas personas y aunque parezca se le atribuya al cabello la característica de “graso”, realmente es el cuero cabelludo la fuente del aspecto sucio y aceitoso del pelo.
Paradojicamente esta situación se produce debido a una
extrema resequedad del cuero cabelludo por detergentes que resecan y hacen que
se tenga que producir más grasa para compensar.
Esto combinado a las constantes lavadas para tener un
aspecto más limpio, crea un circulo vicioso para el cual hay que tomar medidas.
Hacerse tratamientos caseros con aceites de geranio,
naranja, junípero, eucalipto, lavanda y pomelo ayudan a regular la cantidad de
aceite. Las hierbas también suelen ser muy utiles, especialmente la menta, el
tomillo, la manzanilla y la canlendula pues ayudan a balancear las glándulas
cebaseas.
Evita cepillar demasiado el pelo y elige un acondicionador
ligero , el cual debes concentrar más en las puntas.
El aloe puede ser tu mejor aliado, si separas la pulpa, la
licuas y aplicas la mezcla en el pelo, dejandolo reposar por una hora. Esta
planta tiene la propiedad de normalizar las secreciones sebáceas, además de
embellecer el pelo.
Este tipo de pelo suele acarrear, a diferencia de otros, un
problema muy particular, la seborrea. La misma es una inflamación crónica de la
piel que produce muchas escamas y enrojecimiento de la zona afectada;
sentiremos picor que se producirá por una excesiva producción de grasa o una
extrema sequedad, esto variará según los casos.
El exceso de grasa en el pelo puede provocar la caída del
pelo, por lo que es un problema que no se debe ignorar ni convertirse en una
obsesión pues el tratamiento toma tiempo para ver resultados.
Fuente: https://www.conectate.com.do/
0 Comentarios