Franklin Morrison
Al emprender un negocio, no sabemos a ciencia cierta si funcionará o no. Esta es la gran interrogante que se esclarece cuando logramos conjugar variables claves además de que ciertas condiciones existan en el mercado o se creen para que las cosas sucedan probablemente como tú quieras. El tiempo es tu gran aliado y a la vez tu gran enemigo…pero la desesperación, la prisa ni la avaricia del dinero nunca deben ser tus compañeros.
Sin duda, que la corazonada del éxito debe existir para emprender un negocio, y debemos aprender a actuar con amor, pero sin decisiones de negocios emotivas. Saber que cuando dudamos de algo o no estamos seguro, probablemente, mejor será, no hacer nada.
La visión es el norte, lo norma todo. Nos permite que aunque tengamos los ojos vendados, saber hacia dónde vamos. En los momentos más difíciles, donde sin duda, nos pone a prueba la vida, aun en esos momentos debemos mantenernos focalizados y saber cuál es el camino.
Todo debe tener un objetivo, una razón de ser y un resultado. Queremos remar, pero ante debemos saber cómo vamos a llegar y hacia donde vamos.
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