Por: Elena Sanz
La mente cuántica es una teoría reciente que intenta
explicar qué es la conciencia. Hoy te hablamos todo sobre ella.
La mente cuántica, también conocida como la conciencia
cuántica, es una hipótesis que plantea explicar el problema de la
conciencia. Aunque cuenta con no pocos detractores, hasta el punto de que
algunos consideran a sus investigadores como pseudocientíficos, cuanto
menos es una teoría interesante que intenta explicar uno de los mayores
misterios de la humanidad.
¿Qué es la física cuántica?
Para entender qué es la mente cuántica primero debes
comprender, de manera muy superficial al menos, qué es la física cuántica. A
principios del siglo XX sucedió un cisma en la interpretación que teníamos
acerca del mundo físico. Científicos de la talla de Max Planck, Max Born,
Werner Heisenberg, Erwin Schrödinger y muchos otros construyeron los postulados
fundamentales de la teoría.
En términos muy simples, todos estos descubrieron que las
interacciones físicas a nivel subatómico divergían con los conocimientos
físicos que teníamos a nivel macro. Fue necesario crear desde cero un
modelo que intentara dar cuenta de esta interacción, modelo que pasaría a
denominarse mecánica o física cuántica.
Las interacciones a escalas subatómicas distan de las
interacciones a escalas macro. Sin embargo, y hasta donde sabemos, todo lo que
hoy podemos ver (y lo que no también) se puede explicar a partir de estas; ya
que el Universo está construido sobre la base de las partículas subatómicas. El
nacimiento de las estrellas, su muerte, el aire, la luz y todo cuanto puedes
ver parte de la base de esta teoría.
Esto salvando muchos detalles enrevesados, por supuesto.
Ideas como la superposición cuántica, el entrelazamiento cuántico o el
principio de indeterminación de una partícula dejaron de ser ideas dignas de un
truco de magia para convertirse en realidad probada a través de la
experimentación empírica.
¿Qué es la mente cuántica?
Ahora que entiendes las ideas generales de la teoría
interior, puedes comprender qué es la mente cuántica. Las ideas acerca de una
conciencia cuántica la encontramos ya en científicos como Eugene Wigner o
Freeman Dyson. Sin embargo, en el marco de postulados sistemáticos, podemos
decir que los aportes más sólidos nacen de la mano de Roger Penrose y Stuart
Hameroff.
El primero, un físico teórico (ganador del Nobel de Física
en 2020), el segundo, un anestesiólogo. En sus estudios e investigaciones apuntan que el sistema neuronal que da
vida al cerebro forma una extensa red intrincada, en la que la conciencia se
explicaría a través de los postulados de la física cuántica. Esto se
conoce como modelo Penrose-Hameroff.
La idea dicta que toda esta red la conforman microtúbulos
cilíndricos celulares que se acoplan y regulan las funciones sinápticas. De por
medio se generaría la conciencia, de manera que la teoría cuántica sería la
clave para resolver el problema de la conciencia.
De manera general, se consideran tres posibilidades: a) la
conciencia es el resultado de procesos cuánticos en el cerebro, b) los
conceptos cuánticos son útiles para entender la conciencia al margen de la
actividad cerebral, y c) tanto la materia como la conciencia se consideran
aspectos duales de la realidad. Recuerda que hasta el momento no existe una
teoría que explique satisfactoriamente qué es la conciencia.
Críticas a la mente cuántica
Como podrás imaginar, la teoría recibió desde sus inicios infinidad
de críticas, aunque también algunas alabanzas. Una de las críticas más
importantes es que la cuántica se manifiesta, en principio, a
temperaturas muy frías (cerca del cero absoluto). A temperaturas
cálidas, las interacciones dejan de manifestarse.
Esto ha llevado a muchos investigadores a desechar la teoría. Incluso, algunos
han llegado a denominarla como una pseudociencia. A su vez ha servido como
impulsor de lo que hoy se conoce como biología cuántica, así como
que otros expertos indaguen sobre la viabilidad de una
conciencia explicada a partir de los modelos cuánticos.
El problema de la conciencia
La conciencia, en términos muy simples, es el conocimiento
que tienes de ti mismo, de tus actos y de quién eres. También, es la capacidad
para interpretar y decodificar el mundo externo a ti. Aunque han surgido
múltiples teorías para explicar cómo se origina o qué la regula, en realidad
sabemos muy poco al respecto. En definitiva, la conciencia es un problema para
los científicos.
Visto de manera rápida parece un problema sin importancia,
pero en realidad es el santo grial de muchas investigaciones actuales. Explicar
cómo de una masa gelatinosa puede surgir algo que determina quiénes somos y qué
hacemos es la meta de millones de científicos en todo el mundo.
Esto no siempre fue así, por supuesto. Hasta hace
relativamente poco la conciencia no era un elemento importante para la ciencia.
Se pensaba que pertenecía al terreno de la fantasía, o en todo caso que nunca
se podría explicar con ayuda del método científico. Nuestra comprensión de
la actividad neuronal y otros aspectos del cerebro nos ha
llevado replantear estas ideas.
El principal obstáculo al momento de estudiarla es
evidente: se trata de un ente inobservable. Esto no parecería un
problema, ya que continuamente estamos estudiando cosas que no podemos ver
(como átomos, para volver con la física cuántica). El que nuestra conciencia
regule lo que podemos saber sobre la conciencia no ayuda en absoluto a resolver
el problema.
Al margen de todo esto, ten en cuenta que la mente cuántica
es una teoría que busca explicar la manera en que se crea la conciencia. ¿Es
acaso una teoría perfecta o completa? No en absoluto. ¿Cuenta con un respaldo
unánime por parte de la comunidad? Tampoco. Sin embargo, a medida que sepamos
más en el futuro de los procesos cuánticos y del cerebro, podremos ahondar más
en estas ideas.
0 Comentarios