“Constatamos una relación significativamente mayor en los
países menos desarrollados” entre ser dueño de un auto, un televisor y una
computadora y padecer obesidad y diabetes tipo 2 (adquirida de adulto), dijo
Scott Lear, de la
Universidad Simon Fraser en Vancouver, autor principal de la
investigación.
En los países de bajos ingresos la tasa de obesidad pasa del
3,4% en los hogares sin un auto, televisor o computadora, al 14,5% entre los
que tienen estos equipos.
“La misma relación se encontró para la diabetes, cuya
prevalencia aumentó del 4,7% en las familias sin auto, televisor o computadora,
al 11,7% para los hogares que los poseían”, afirmó Lear, cuyo estudio se
publica en la revista de la Asociación Médica Canadiense (CMAJ, por sus
siglas en inglés).
Hasta ahora, las mayores tasas globales de obesidad y
diabetes tipo 2 se daban ampliamente en países ricos, pero este problema de
salud pública debería aumentar en los países de ingresos bajos y medios a
medida que se desarrollan e industrializan, pronosticaron los investigadores.
Los expertos analizaron datos de 153.996 adultos y 107.599
hogares en 17 países. Los participantes respondieron a un cuestionario sobre su
actividad física, el tiempo que pasaban sentados y sus hábitos alimenticios,
así como si tenían televisor, computadora y auto.
También informaron su altura y peso para determinar el
coeficiente de masa corporal y dijeron si padecían diabetes.
En los países de bajos ingresos, ser dueño de un auto, un
televisor y una computadora está ligado a una disminución del 31% en la
actividad física y un aumento del 21% del tiempo que se pasa sentado, así como
un aumento de 9 cm
de diámetro de cintura.
En Estados Unidos, más de uno de cada tres adultos (34,9%) se
considera obeso, lo cual representa unos 78 millones de personas.
0 Comentarios