Joanna Guillén Valera
El sexo tántrico es una forma de practicar sexo más allá de lo de tradicional. “Alude a una serie de prácticas y técnicas ancestrales que enseñan a mover la energía sexual por todo el cuerpo”, describe María Lucía Banker (@by_marialu), mentora en Transformación y Maestra tántrica.
Quien practica sexo tántrico “aprende a circular esa
energía con su pareja, formando un circuito que los recarga a ambos”. Es una
práctica que va más allá de lo físico. “Se considera una forma meditativa”,
señala. De hecho, según ella, “quien practica sexo tántrico deja de tener
orgasmos genitales para convertirse en un ser orgásmico, es decir, experimenta
un orgasmo de cuerpo completo”.
La buena noticia es que cualquier persona que tenga
una preparación previa puede experimentar el sexo tántrico, sólo hay que abrir
la mente. "En muchas ocasiones las personas no experimentan nuevas
cosas, ya sea por el prejuicio o por mitos", indica Banker. "Para
abrir la mente, es clave aceptar que nos queda mucho por aprender". Investigar,
leer sobre el sexo tántrico o permitirse vivir la experiencia de un
taller, una clase o mentoría de esta clase "es algo que da la
experiencia para verificar lo que se siente".
Una de las claves del éxito del sexo tántrico está en
la relajación. Esto es así porque “la energía no puede circular en un
cuerpo tenso o estresado”. Es fundamental “aprender a relajar el cuerpo, pero
sobre todo, a deshacerse de nudos o tensiones musculares”, señala la experta.
A la hora de tener una sesión de sexo, “si la persona se
encuentra relajada, puede disfrutar más de cada pequeño detalle, saborear más
minuciosamente cada momento y gozar intensamente de cada experiencia”,
aporta Antonio Murillo, psicólogo sexólogo, coach sexual y responsable del
Grupo de Trabajo de Psicología, Sexología y Pareja de la Delegación de Córdoba
del Colegio Oficial de la
Psicología de Andalucía Occidental.
La idea, por tanto, no es realizar sexo para relajarse
sino relajarse para realizar sexo. “El sexo tradicional relaja por el solo
hecho de producir hormonas que son muy beneficiosas para la salud como la
oxitocina o la dopamina, químicos potentes producidos de manera natural por
nuestro sistema endocrino y que sirve para la relajación”, afirma Banker.
La experiencia sexual, sobre todo los orgasmos, “implican
una descarga de tensión, tanto muscular como mental, lo cual puede ayudar a
relajarse tanto física como psicológicamente”, añade Murillo.
Sin embargo, como informa la experta en tantra, “en el sexo
tántrico, este laboratorio químico no solo se pone en marcha, sino que por
medio de prácticas respiratorias, se puede circular el fluido cerebro raquídeo
y bañar el cerebro, lo cual se traduce en una recalibración del sistema
nervioso”. Por eso, afirma, “quienes practican tantra, pueden experimentar más
placer que quienes no lo practican porque los circuitos de su sistema nervioso
han sido preparados para recibir sensaciones más potentes”.
Hábitos saludables
Además de la relajación, tener unos buenos hábitos
como una alimentación sana y equilibrada y practicar ejercicio físico con
regularidad son muy importantes en el sexo tántrico.
“Más allá de estar relajados para poder circular
energía, se requiere un proceso de desintoxicación previo porque la
energía tampoco puede circular en un cuerpo que está lleno de residuos tóxicos
que provienen de malos hábitos alimenticios y de una vida sedentaria”. Por eso,
otro de los consejos para su práctica es “cambiar el estilo de vida y los
hábitos para que puedan experimentar el flujo de energía y alcanzar
estados de gozo, placer y éxtasis”.
Evitar la eyaculación
Pero la característia que diferencia al sexo tántrico del
resto de practicas sexuales está en la eyaculación. “Algo clave en el sexo
tántrico es que los hombres que aprenden a practicar tantra llegan a evitar la
eyaculación”, añade Banker.
Esto, según la experta, “es una técnica (denominada
inyaculación) que se practica y que consiste en reparar la eyaculación del
orgasmo”. Tal y como indica “esto es posible hacerlo porque la eyaculación es un
acto reflejo que no está ligado al clímax. Por medio de ella, los hombres
aprenden, de alguna forma a reabsorber el semen y experimentar orgasmos más
intensos que por medio de la eyaculación”.
Gracias a esta práctica de inyaculación Banker asegura que
“los hombres se vuelven multiorgásmicos, ya que no tienen que esperar al
‘periodo refractario’ para recuperar la erección”.
Atentos a la respiración
La respiración es otra de las claves del tantra y que,
evidentemente, se aplican en esta práctica sexual. Es importante porque “la
manera en que se circula la energía sexual en el cuerpo es por medio de
técnicas de respiración”.
Por otro lado, “cuando en el sexo tradicional llegamos a la
excitación y la respiración se vuelve entre-cortada y jadeante, el cuerpo se
tensiona, y esto impide la circulación libre de energía”. Con solo respirar
de “manera lenta y profunda se involucran otras partes del cuerpo como el
estómago y el diafragma, por lo que pueden alcanzar estados de relajación
mayores que permiten una expansión de la energía orgásmica”, define.
Por eso, los expertos en sexo tántrico hablan de orgasmos
de cuerpo completo, que se consiguen gracias a las técnicas de respiración que
producen “una descarga prolongada de oxitocina”.
Crear el ambiente idóneo
Si quieres crear atmósferas relajantes para comenzar la
práctica sexual, el consejo de Baker es “conectar con los sentidos y sintonizar
con el entorno para limpiarlo y energizarlo”. Para limpiar los sitios, su
recomendación es “quemar salvia blanca, con incienso y usar sonidos de cuencos
tibetanos o con mantras”. Según la experta “la música produce frecuencias que
armonizan o desarmonizan los ambientes”.
Una vez armonizado el espacio, “podemos hacerlo más
agradable con velas, aceites esenciales, flores, con el sonido del agua o
con una música erótica o relajante, según el estado de ánimo de la persona”.
Para finalizar, si se quiere involucrar a todos los sentidos, también se puede
llevar vino, fresas o frutas y alimentos afrodisíacos que invitan al deleite
sensorial”.
Posturas y duración
Sobre si existen unas posturas determinadas para practicar
sexo tántrico y conseguir más placer, la experta recuerda que "hay tantas
como el kilometraje que te dé la imaginación pero no se debe caer en la
creencia falsa de que la cantidad de posturas es lo que hace un buen sexo".
Como señala "no es la cantidad de técnicas o posturas que practiques, es
el nivel de consciencia con que lo practiques".
En cuanto a la duración en este tipo de práctica
sexual, también advierte de que "es un cliché pensar que el sexo
tántrico consiste en cuánto puedes durar en una relación sexual". En
su opinión, "la duración es lo de menos".
0 Comentarios